Buscar este blog

sábado, 15 de junio de 2024

Pero… ¿qué clase de "izquierda" es esta?

En Francia, la ultraderechista Marine Le Pen ha aplastado a Macron (literalmente)

Eso ha puesto en orden de batalla a toda la "izquierda" o lo que queda de ella. Se ha formado un Frente Popular, que chachi, que wai.

La verdad es que una racista y xenófoba como Marine Le Pen es intolerable. Francia ha estado chupando de África por más de dos siglos y no tiene ningún derecho a quejarse de la inmigración.

Aparte, la extrema derecha siempre viene con "paquetes de ajuste" debajo del brazo. Viene a rebajar las condiciones de vida de la población menos favorecida; siempre es una gran amiga de "los mercados".

Está bien que aparezca una respuesta desde la izquierda, pero……….

¿Estás hablando en serio?

¿Apoyo incondicional a Ucrania?

¿Estás de broma? ¿De qué coño de izquierda me estás hablando?

Ahora, apoyar a un Régimen de mierda lleno de nazis, imbéciles, traficantes y vividores resulta que es de izquierdas.

Apoyar a un Régimen que está enviando a una muerte segura a su población por los intereses de Occidente ahora resulta que es de izquierdas.

Apoyar a un Régimen que ha convertido Ucrania en un enorme campo de concentración del que ya prácticamente nadie puede salir, ahora resulta que es de izquierdas.

Apoyar a un grupillo de delincuentes que no hace más que pedir armas que luego aparecen en lugares dispares del globo es de izquierdas.

Apoyar a un mendigo repulsivo que sólo sabe pedir más y más dinero ahora resulta que es de izquierdas.

Apoyar a una mafia que está destruyendo la economía de Europa, ahora resulta que es de izquierdas.

¿Esta gente qué fuma?

En Alemania, ha habido una escisión en Die Linke, un partido que sería el equivalente a Izquierda Unida que apoya a Ucrania. La diputada Sahra Wagenknecht se escindió de ese partido y ha fundado BBW (Bündnis Sahra Wagenknecht)

BSW ha sacado unos buenos resultados en las elecciones europeas y apuesta por negociaciones de paz que acaben con la guerra en Ucrania, aunque condena la invasión rusa.

¡Que no, hombre, que nooooooooooooooooo!

La "invasión" rusa es la consecuencia de un golpe de Estado patrocinado por Estados Unidos y la propia Alemania que se produjo en 2014. Ese golpe de Estado rompió el equilibrio de fuerzas dentro de Ucrania y produjo un enfrentamiento entre las fuerzas "europeístas" y las "prorrusas".

No se puede condenar la "invasión" rusa sin antes condenar la intervención alemana en el Maidán, sin asumir la responsabilidad de Alemania en los sucesos de 2014.

Sin 2014, Sahra, no habría guerra en Ucrania.

Occidente encendió la mecha en 2014 y ahora no puede escaquearse de su responsabilidad en el conflicto.

Cualquiera que sepa como funciona la geopolítica podía prever, ya en 2014, que los rusos iban a responder un día u otro.

Y lo hicieron.

Es más que claro que esta "izquierda" no es más que un conjunto de bon vivants que sólo viven para carnavales folklóricos multicolor y que ha perdido todo contacto con la realidad.

En un contexto económico cada vez más adverso para la clase obrera, este tipo de "izquierda", que le da apoyo incondicional al fascismo de la OTAN, ya no nos sirve.

Se les tendría que reclamar incluso que devuelvan la etiqueta de "izquierda", porque no son de izquierda.

Sólo la izquierda rojiparda, la auténtica, la de todo la vida, puede hacer que la izquierda resucite.

Con este circo de verdes belicistas y rosas cagamonas nos vamos al desastre.

Hay que refundar la izquierda y hay que hacerlo ya.

No hay comentarios:

Publicar un comentario